Hay noches que el desvelo se cuela entre los parpados, y no es el hambre de tí (como dice aquella canción que, acurrucada en el recuerdo de tus dedos en mi pelo, me habita) es la desgana de mí.
Y escribes con el corazón en la mano y el peso de la pena en el cuerpo. Y te lo prometes un día y otro, aún a sabiendas que volverás a tropezar. Pero te lo vuelves a prometer. Y eso es lo que has sido siempre y lo que siempre has hecho. Ya sabes, para bien o para mal.
Porque voy rompiendo los bocetos que hice de lo que quería ser y nunca seré. Escondo debajo de la alfombra todo aquello que no me deja vivir.
Pero siempre cuento contigo.
Eso era amor de Ángel González
Le comenté:
—Me entusiasman tus ojos.
Y ella dijo:
—¿Te gustan solos o con rimel?
—Grandes,
respondí sin dudar.
Y también sin dudar
me los dejó en un plato y se fue a tientas.
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OH OH OH!
ResponderEliminarQUE VEUEN ELS MEUS ULLS!
LA LAURA TÉ BLOG!
que guay!! benvinguda nena de l'abric groc XD